Consejos para una buena estimulación en el día a día

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Afortunadamente son muchos los avances en las neurociencias que nos abren un prometedor futuro de posibilidades. Hemos mejorado ampliamente el conocimiento acerca de la estructura, el funcionamiento y la plasticidad cerebral, lo cual a su vez nos ha permitido estimular su desarrollo y actuar, de algún modo, sobre sus potencialidades haciendo posibles logros antes impensables.
Se ha demostrado que más del 70% del desarrollo cerebral se produce durante los 3 primeros años de vida, cerca del 90% antes de los 6-7 años. Una buena estimulación en esta etapa, siempre que sea adecuada, nos da una gran ventaja: “actuamos sobre la estructura cuando es más moldeable”.
La estimulación de nuestro cerebro debemos entenderla como algo más que hacer una serie de actividades puntuales. Requiere tener una buena preparación y conocimientos acerca de la estructura o función cognitiva sobre la que queremos incidir, objetivos claros (qué queremos lograr), constancia, disciplina y persistencia (mantener la estimulación en el tiempo). Es muy importante valorar el componente lúdico de estas actividades, puesto que cuando disfrutamos una tarea mantenemos el interés en ella y aprendemos más fácilmente y mayor cantidad de cosas (asociación aprendizaje- emoción). Otro elemento clave para una estimulación adecuada es el soporte afectivo, la relación de apego que el niño establece con el adulto. Un peque que se siente seguro y confiado responderá con interés y motivación frente a la estimulación.

        Cuando la estimulación se orienta a los más pequeños (0 a 3 años), las actividades deben centrarse fundamentalmente en aspectos sensoriales y en el lenguaje. Los peques en esta etapa de la vida exploran, descubren y conocen el mundo a través de sus sentidos; nombrándolo y significándolo en la medida en que su lenguaje se va desarrollando. El mundo que los rodea y las acciones que en él desarrollan: alimentarse, asearse, vestirse, deambular, etc. (actividades de la vida diaria) se convierten en un laboratorio de experimentación y estimulación inagotable e inmejorable.
Estimular adecuadamente es sencillo, no requiere materiales especiales ni procedimientos complejos. La vida diaria: en casa, en el parque, al montar en coche… está llena de posibilidades de estimulación para los niños. Aquí os voy a ir proponiendo algunas actividades superestimulantes para los más pequeños (0 a 3 años) que no debéis considerar como tareas obligadas u objetivos a proponeros conseguir con vuestros peques, sino simplemente caer en la cuenta de los muchos momentos y situaciones del día a día aprovechables para una buena estimulación y favorecedores por tanto del desarrollo y madurez de nuestros niños/as.

Dichas actividades las podeis encontrar en estas guias que podeis ver y descargar en nuestro apartado «DESCARGAS» en esta misma web.

Si a pesar de esa estimulación familiar aprovechando el día a día nuestro hijo/a no desarrolla adecuadamente, es cuando no debemos esperar y acudir lo antes posible a especialistas que complementen nuestra tarea.

 

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